Un alto directivo de uno de los grupos televisivos confiesa a El Confidencial Digital que José Manuel Soria es la “bestia negra”, tanto de Mediaset como de Atresmedia. Ambos grupos le acusan de atacar con sus decisiones al sector audiovisual y por eso lo han puesto en su punto de mira.
Explica que están dispuestos a “llegar hasta el final”. Incluso, hasta tratar de acabar con la carrera política de José Manuel Soria.
-- “Si queremos cargarnos al ministro, nos dura una semana”, afirma categóricamente dicho alto directivo.
Estas son las afirmaciones que sobre José Manuel Soria se publican en el libro de Carlos Sosa, y que ya manejan las televisiones en su dossier:
-- ‘Caso La Favorita’. Sosa afirma que el ayuntamiento de Las Palmas, que dirigía el actual ministro de Industria, aprobó un pliego de condiciones para favorecer a una empresa en la compra de una vieja factoría tabaquera. Lo define como “pelotazo”: el equipo de Soria pagó por la finca casi el triple de lo que se pedía. Calcula siete millones de plusvalía.
En ese momento, uno de sus concejales viajó a Suiza y se le implicó con una cuenta allí en la que aparecían las iniciales: JMS (José Manuel Soria, supuestamente). Una fiscal del país helvético quiso investigar dicha cuenta, pero no se llegaron a abrir diligencias por corrupción.
-- Amaño de un concurso para la compra de un inmueble en Las Torres (Las Palmas).
-- “Mintió ante un juez y bajo juramento de decir la verdad”.
-- “Forzó la maquinaria municipal al máximo para que un concurso se adjudicara a la compañía Isolux”. Soria se querelló contra el periódico en el que trabaja Sosa, pero un empresario compareció como testigo y el juez absolvió al periodista en base a esta declaración.
A este empresario, Soria le amenazó “con el ostracismo si ejercía su derecho al recurso judicial: le destrozaba por completo su imagen pulcra y de buen gestor”. Llegó a decir: “Lo quiero ver en la cárcel”.
Cuentas en Suiza
-- Sosa afirma que un empresario local dispone de documentos que demuestran que Soria operó con cuentas en Suiza. De momento, no se ha decidido a sacarlas a la luz pública.
-- El ayuntamiento que regía Soria fue acusado de prevaricación y desvío de poder por la tasación de un suelo para la construcción de un gran complejo residencial donde se encontraba el antiguo canódromo de la ciudad.
-- Planta potabilizadora de agua. Soria adquirió la instalación más avanzada del mundo y la más cara. Actualmente, se va a desguazar y se venderá todo el material como chatarra.
-- Depuración de inspectores de Policía: “Por petición expresa del ministro, pasó de dirigir un grupo de la Brigada de Información a patrullar las calles con uniforme y en un coche Zeta. Ese inspector conserva a buen recaudo una grabación que es una verdadera bomba: Soria ordenaba ejecutar sentencias de muerte profesional”.
El caso Chalet
-- Vacaciones familiares pagadas por un empresario local, Björn Lyng, en un complejo de lujo. La factura calcula que ascendió a 4.000 euros. También la familia del actual ministro viajó con él a Salzburgo en su jet privado. Cuando la declaración de interés general de varios proyectos turísticos, entre otros uno de Lyng, entró en el Parlamento de Canarias, la tramitación caminó sin apenas dificultades.
-- El caso Chalet. Lo define como el más escandaloso y el menos conocido. “Tratar de beneficiar a un empresario amigo del que recibió el regalo de vivir gratis durante casi dos años en un chalet de su propiedad mientras le construían una ostentosa mansión en el barrio más selecto de Las Palmas.
-- “Soria mintió ante la comisión parlamentaria y eso es delito”.
-- “Intereconomía, El Mundo y ABC son tres ejemplos de medios de comunicación nacionales convenientemente engrasados por Soria para tratar de frenar a la prensa crítica”.
-- Financia a Intereconomía TV con dinero público procedente de Canarias.
¿Cómo es Soria?
En este libro se describe también el carácter del ministro de Industria durante su etapa política en Canarias. Estos son algunos de los comentarios que se pueden leer en él:
-- “Violento tanto física (lanzaba objetos pesados de un lado a otro del despacho cuando se cabreaba), como verbalmente, el calificativo más suave que profería hacia sus colaboradores era el de inútil”.
-- Llamó a la agencia EFE para atacar a Jerónimo Saavedra por su homosexualidad, conocida pero no reconocida entonces. Afirmó: “Ha dado un gran patinazo, lo que me lleva a pensar que pierde más aceite del que yo creía”.
-- “Carece por completo de habilidades democráticas, un déficit que logra disimular gracias a su disciplinado empleo de los conocimientos que ha adquirido en los cursos de telegenia y comunicación que le han impartido en el PP, y las terapias para controlar sus impulsos nerviosos que ha recibido de un especialista en Londres”.
-- “Si algo no le gustaba, lo manifestaba sin recato, y si identificaba en alguno de esos medios a algún periodista desafecto y más atrevido que la media, pedía al directivo correspondiente que lo despidiera sin miramientos. Lo hizo en Antena 3 y lo hizo en La Provincia, en algunas ocasiones con éxito”.
-- “Financió a Intereconomía sin disimulo a través de clamorosas irregularidades con fondos públicos”.
Caso Salmón
-- Se enfrentó a la subdirectora de La Provincia en 2008, Teresa Cárdenes, que le acusó de oportunista por desplazar a familias de las víctimas del accidente de Spanair en Barajas para ocupar él y su jefe de prensa plazas en el primer avión que salía de Gran Canaria rumbo a Madrid. Soria realizó contra ella “acusaciones personales y de tono sexista”.
-- Imputación de Soria en el caso Salmón. La Provincia, de Prensa Ibérica, informó del caso y Soria se molestó y se dirigió a la cúpula del grupo editorial. La empresa despidió al director del periódico canario, Ángel Tristán Pimienta, algo de lo que el vicepresidente del Gobierno se jactaba de conocer incluso la fecha exacta en que se iba a producir la destitución.
-- Colocó en el centro territorial de TVE en Canarias a Carlos Taboada, “para que ejerciera de comisario político y jefe de prensa suyo”.
¿Por qué esta campaña de las televisiones?
Tanto Mediaset como Atresmedia están dispuestas a airear estas acusaciones contra José Manuel Soria con un objetivo: que el ministerio de Industria no les perjudique más. Es decir, que frene nuevas decisiones contra los operadores de televisión en abierto.
En ambos grupos ya sabían que la sentencia del Supremo que exigía cerrar nueve canales era de obligado cumplimiento y que tenían que acatarla. Su objetivo es que Industria escuche sus peticiones en dos conflictos que se avecinan para ellos en los próximos meses:
1. El nuevo recurso interpuesto ante el alto tribunal que pide cerrar otros ocho canales de televisión. Las cadenas tienen la luz de alarma encendida ante tal posibilidad.
2. El retorno de la publicidad a TVE. Hay ministros,como Montoro, presionando a Moncloa para que vuelvan los anuncios a la televisión pública, lo que pondría en grave riesgo la cuenta de resultados de las privadas.
ECD se ha puesto en contacto con el ministerio de Industria para conocer el parecer el José Manuel Soria y su equipo. La jefa de prensa atendió la llamada y afirmó que consultaría el asunto. Al cierre de esta edición no se había recibido ninguna respuesta.
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