Los extrabajadores de Telemadrid vuelven a la carga contra Ignacio González. A falta de un día para que el Tribunal Supremo decida sobre el ERE aplicado en el ente público hace algo más de un año y que dejó en la calle a 861 personas, el colectivo ha presentado una querella criminal contra el presidente de la Comunidad de Madrid por su ático de Marbella. Según denuncian, el piso fue una “dádiva” que el jefe del Ejecutivo regional recibió de Enrique Cerezo tras tomar decisiones que beneficiaron al empresario y descapitalizaron la cadena.

En la querella que los extrabajadores de Telemadrid han presentado en el Supremo se acusa al presidente madrileño, según recoge infolibre.es, de la presunta comisión de siete delitos: cohecho, prevaricación, administración fraudulenta, tráfico de influencias, blanqueo de capitales, delitos contra Hacienda y asociación ilícita.

Es más, la antigua plantilla del ente público sostiene que el presidente madrileño es “el propietario real y efectivo” del ático de lujo que tiene en Estepona desde que éste fue adquirido, en 2008, “con recursos relacionados con el entorno de Enrique Cerezo” y a nombre de la sociedad Coas Investors, radicada en el paraíso fiscal de Delaware (EEUU).

González y su mujer Lourdes Cavero, propietarios del ático, han sostenido que en 2008 alquilaron la vivienda que acabaron comprando en diciembre de 2012, ante el escándalo que se estaba creando por las distintas informaciones que apuntaban a un alquiler demasiado bajo para la zona (2.000 euros mensuales) y de las supuestas irregularidades en su adquisición en 2008 por parte del empresario mexicano Rudy Valner.

La compra tuvo lugar por 770.000 euros. El 80% de la vivienda (equivalente a 616.000 euros) se escrituró a nombre de la esposa de González, mientras que el 20% restante sería propiedad del presidente madrileño tras pagar 154.000 euros.

Operaciones que favorecieron a Cerezo

En su querella, los extrabajadores de Telemadrid hacen una detallada descripción de las operaciones millonarias que habrían favorecido a Enrique Cerezo y que, según denuncian, provocaron un agujero en la cadena pública.

Tal y como recoge el medio digital, una de ellas fue la adquisición por parte de Telemadrid de los derechos de emisión de los partidos del Atlético de Madrid por 230 millones de euros, operación que habría contado con el visto bueno del Gobierno presidido entonces por Esperanza Aguirre, cuyo 'número dos' era Ignacio González, y que según la denuncia se llevó a cabo a sabiendas de que los números “generaban déficit” y que, por tanto, perjudicaría a Telemadrid.

La empresa Madrid Deporte Audiovisual (MDA) fue la que compró los derechos por cinco años a pesar de que diversos informes señalaban que la operación sólo generaría beneficios a partir del octavo año; y el acuerdo acabó por romperse al tercer año. Sus accionistas eran Telemadrid (49%), Caja Madrid (47,5%), Atlético de Madrid (2,5%) y Getafe (1%).

Y esta empresa, denuncian los extrabajadores de Telemadrid, protagonizó otra operación ruinosa para el ente público: pagó unos 24 millones de euros al Atlético de Madrid entre 2007 y 2011 por un contrato publicitario que el club presidido por Cerezo no cumplió.

Aunque no acaba ahí, ya que la querella se hace eco también de los presuntos favores de Ignacio González a Enrique Cerezo en la adjudicación por parte de la Comunidad de Madrid de una decena de frecuencias de Televisión Digital Terrestre (TDT) a la sociedad del empresario, Televisión Digital Madrid SLU. Esto le habría permitido “establecer una emisora de ámbito regional con capacidad de llegar a un amplio espectro de la población, aspecto fundamental para aumentar los ingresos derivados de la publicidad”.

Y la gestión de la publicidad de Telemadrid es la cuarta operación que se denuncia en la querella, ya que habría supuesto un beneficio para Enrique Cerezo. Concretamente, los empleados afectados por el ERE denuncian que la comercialización publicitaria del canal público también acabó en manos de Cerezo, cuya sociedad Boomerang se hizo con el 30% de la empresa que la gestionaba: Multipark S.A. El resto de capital de esta sociedad estaba en manos de Telemadrid (35%) y Caja Madrid (35%).

Es decir, Telemadrid dejaba en manos de Cerezo, propietario de un canal autonómico y por tanto de uno de sus principales competidores, la gestión de la publicidad. Y los extrabajadores de la cadena denuncian también que se favoreciese a Cerezo con otra operación. Se trata de la compra de derechos de televisión a empresas de su grupo como Videomercury, Enrique Cerezo Producciones Cinematográficas SA, o CIPI Cinematográfica SL.

Y habría otra operación que según los querellantes favoreció al presidente del Atlético de Madrid. En la denuncia se habla de la adjudicación a Boomerang TV de un contrato por parte de la empresa pública del agua, el Canal de Isabel II, controlada por Ignacio González. Concretamente, fue el acto de inauguración de los Teatros del Canal, por la que se pagó a Cerezo 1,5 millones de euros.

Todas estas operaciones en las que intervino Ignacio González de forma directa o indirecta están directamente relacionadas con el ático de Marbella, dicen los querellantes, que consideran el inmueble una “dádiva” de Cerezo como 'pago' por ello.

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