1775 millones de euros de beneficios en 2011 y una declaración de la renta "a devolver".
Se llama ingeniería financiera pero roza el fraude fiscal y se acompaña de mucho morro.
Apple factura en España, declara beneficios en Irlanda y desvía el dinero a un paraíso fiscal desde allí.
Ya hemos hablado alguna vez del "milagro Irlandés" y su estrategia basada en facilitar la implantación de multinacionales a toda costa. Cada cual trata de salir de la crisis como puede y no es penalizable ésta opción. Sin embargo, sí que es cuestionable la permisividad de nuestro país con éstas cosas. Cada país debe de preocuparse por sí mismo, necesitamos protegernos de estos fraudes legales.
La culpa al final es del consumidor, nuestra. Consumir "made in China", "made in Tánger como el Dacia lodgy" o "made in Spain" es un acto de responsabilidad, más aún con nuestra situación actual.
economia.elpais.com/economia/2012/05/20/...37547016_498517.html