Un nuevo elemento de confusión se añade a partir de ahora a la ya de por sí complicada maraña que supone el recibo de la luz en España, acentuada a raíz de la nefasta reforma eléctrica perpetrada por el Gobierno al son de las eléctricas. Desde el 1 de octubre aquellos hogares que estén sometidos al Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) y tengan en sus domicilios contadores inteligentes integrados en el sistema de telegestión verán cómo su factura se calcula según el coste de la energía por horas, es decir, la electricidad variará de precio según el momento del día y el día de la semana en el cual hagamos el gasto correspondiente.
¿Qué significa esto? Que hay horas del día en las que la luz está más cara y horas en las cuales tiene un coste menor, y ello se trasladará a la factura. En este sentido, la referencia para el cálculo de estos precios la dará la página web de Red Eléctrica de España, que indica el coste del kilowatio/hora en tiempo real, eso sí, de una manera muy confusa y casi inaccesible para los consumidores. Para que tengamos una referencia, eso sí, hay algunos trucos que podemos considerar.
Lo primero, los seguimientos que pueden hacerse a la evolución de los precios de la luz por horas indican que hay comportamientos muy diferentes si hablamos de días laborables o bien de fines de semana y festivos. Con respecto a los laborables, las franjas en las que la electricidad está más cara se encuentran a primera hora de la mañana, entre las 7.00 y las 10.00, y a última de la tarde, a la hora de la cena, entre las 20.00 y las 23.00. Es el 'prime time' de la energía, que coincide con horas de máxima demanda entre los hogares y que tenderá a encarecer el precio. A cambio, durante la sobremesa y por la noche el coste por hora tiende a bajar ostensiblemente.
Más información:
Llega la factura de la luz por horas: las eléctricas empujan a los consumidores a subir el fijo de potencia